Preguntas más frecuentes 2017-05-19T18:11:29+00:00

PREGUNTAS FRECUENTES

El sistema necesita alcanzar una temperatura determinada para calentarnos, esta temperatura está calculada para que el intercambio térmico por radiación infrarroja sea el necesario para que nos calentemos. Efectivamente, el calentamiento de la placa se hace a través de energía eléctrica y, por tanto, se calienta ésta por efecto Joule. Lo que ocurre es que este calentamiento no tiene como objetivo calentar el volumen de aire de la estancia que queremos calefactar, para que una vez conseguido esto, nos calentamos directamente nosotros, es decir por convección, sino que es para que la placa alcance el punto de temperatura en el cual la emisión de infrarrojos que produzca nos caliente, así como a los materiales que hay en nuestro entorno, Es decir, es el activador del efecto Stefan-Boltzmann, que es la ley que define la transmisión de calor por radiación, no por convección.
En resumen, calentamos la placa por efecto Joule y nos calentamos nosotros por efecto Stefan-Boltzmann, al igual que hace el Sol con la Tierra.

Como indicamos en la cuestión anterior, necesitamos calentar la placa a una temperatura determinada para que exista un intercambio térmico satisfactorio por infrarrojos entre ella y los cuerpos que se encuentran en su radio de acción. La energía eléctrica que se consume es solo para calentar la placa, no para que este caliente el aire que la rodea, por ello, al ser un intercambio directo entre la placa y los cuerpos que se encuentran en su entorno, la cantidad de energía necesaria para esto es considerablemente inferior que la necesaria para conseguir el mismo objetivo vía convección. Como ejemplo práctico, consideramos el calentamiento de la Tierra por el Sol. Si éste se llevase a cabo vía convección, suponiendo que existiera algún tipo de gas o de medio entre el Sol y la Tierra, éste tendría que tener caliente todo el espacio entre él y nosotros, con lo que se necesitaría una cantidad de energía ingentemente superior que como lo hace a través de radiación.

No, dado que estamos calentando por radiación infrarroja, la cantidad de energía absorbida, y por tanto el aumento de la temperatura, depende de los objetos y múltiples parámetros del entorno en estudio.
Para el cálculo de una estancia, hacen falta una serie de datos:

  • Por un lado, correspondiente a la capacidad de absorción, emisión y reflexión, por parte de los objetos de la estancia en estudio, que depende de los materiales de los que están constituidos y sus colores.
  • Por otro lado, otros datos como nivel de aislamiento de la estancia, orientación, zona geográfica en la que nos encontramos, etc. Todos estos datos nos permiten poder calcular y dimensionar perfectamente su vivienda, de manera que funcione, aportándole el máximo confort y ahorro de energía.
Indicamos que el sistema es ecológico debido a cuatro motivos fundamentales:

  • Debido a que necesitamos emplear una cantidad considerablemente inferior de energía a otros sistemas, determinamos que, al ser inferior el consumo, la cantidad de energía que es necesario producir en origen es inferior, con lo que estamos disminuyendo las emisiones de CO2 y de otros gases contaminantes a la atmósfera, así como en origen se producen menos cantidades de residuos.
  • Al no tener partes movibles que supongan un desgaste con su funcionamiento, no genera residuos procedentes de piezas defectuosas.
  • Para su funcionamiento no necesita ni líquidos, aceites, fluidos térmicos, etc., ni gases, como en las bombas de calor, susceptibles de contaminar, bien por averías, bien por la finalización de la vida útil del aparato.
  • Al ser la vida útil del equipo muy elevada y que la mayor parte del aparato es reciclable, la cantidad de residuo generado por él es muy pequeña, con lo que concluimos que el sistema de calefacción más ecológico que existe actualmente en el mercado.

Normalmente, no. Si el sistema se coloca en lugar de otro anteriormente instalado, y este otro sistema es eléctrico, incluso disminuiremos la potencia. Si por el contrario, la potencia contratada es pequeña, bien porque no se disponga de ningún otro sistema de calefacción, o bien porque el sistema de calefacción a sustituir no sea eléctrico, es posible que tenga que ampliar la potencia contratada según en que caso, ya que al ir la calefacción independiente por estancias, no siempre el total de placas esta funcionando, ya que se gradúan los termostato según los hábitos de vida que tenga en las diferentes estancias.

Efectivamente, las bombas de calor son sistemas que tienen un alto rendimiento. Dentro de los sistemas de calefacción por convección, son los que a nivel general poseen mayor rendimiento. Nuestro sistema, al ser la calefacción por radiación, necesita menos potencia en la instalación y en su funcionamiento, ya que no ha de calentar aire para que este a su vez caliente superficialmente la estancia, de hay nuestra gran ahorro energético
En función del tipo de instalación y características de la zona a calefactar, el ahorro de nuestro sistema es mayor o menor respecto a las bombas de calor. La mayor diferencia la marca el confort aportado por cada uno de los sistemas, así cuando el nuestro es extremadamente agradable y saludable, proporcionando una distribución de temperatura en la sala muy uniforme, no afectando al aire y por tanto secándolo. Los sistemas por bomba de calor estratifican mucho el aire en el interior de la estancia, provocando diferencias térmicas que pueden ser superiores a10oC. En días con una temperatura exterior inferior a 5oC, el sistema no funciona correctamente. El aire caliente que aporta tiene menos densidad y se acumula en el techo provocando la sensación de agobio, de cabeza caliente y pies fríos. Por otro lado, los sistemas de bomba de calor son los que más resecan el aire, con los que, en muchos casos, se hace necesaria la colocación de humidificadores para incrementar el confort proporcionado por la instalación, con el incremento económico y en consumo que esto con lleva.

Para las mismas prestaciones, resulta considerablemente más económico debido a que la instalación de éste es muy simple, no teniendo en la mayoría de los casos que hacer ningún tipo de obra, lo cual hace que la instalación sea muy rápida. Además no ocupa M2 útiles de vivienda al ir en el techo, una casa que lleve 10 placas le hace ganar 10 m2 de vivienda habitable en comparación con otras instalaciones
El tiempo de instalación para una vivienda normal de unos 90 m2, el promedio es de día y medio para la totalidad de la vivienda, incluyendo baños y cocina. En definitiva, en la mayoría de los casos, una instalación completa de la vivienda, en las mismas condiciones que cualquier otro sistema, saldrá más económico.

No solamente no es nociva, sino que es necesaria para la vida. Si no fuese por la radiación infrarroja procedente del Sol, la vida en nuestro planeta no sería posible. Además del efecto saludable sobre nuestro organismo del infrarrojo, nuestras placas poseen otras particularidades que la hacen muy saludable, tales como la emisión de iones negativos con sus numerosas cualidades beneficiosas. Por ejemplo, existen altas concentraciones de iones negativos a la orilla del mar o en la montaña que provocan un bienestar altamente saludable. Igualmente con el efecto de la nanoplata, eliminamos las bacterias y los olores de nuestra casa.